Antes de que la actualidad sobre las harineras obligue a una nueva reflexión -en la que se confirmará necesariamente todas las dudas expresadas ayer-, no dejo pasar un minuto más para tratar otro asunto.
Con dos enfoques: uno, la llamada a acudir al festival taurino organizado en beneficio de la Cruz Blanca o, en su defecto, a apoyar la recaudación del mismo; dos, el lamento por una nueva demostración de la ontología de la fateza, como dice Jorge.
Los hermanos y voluntarios de la Cruz Blanca hacen una labor imprescindible y no es preciso ser creyente para reconocerlo, a pesar de algunos tontos de a pie que lo ignoran.
La sociedad oscense -o sea, tú y yo- y las administraciones públicas han encontrado a quien se ocupe de los parias. Un donativo, una subvención y ellos recogen y atienden a los desheredados para que podamos seguir mirando a otro lado y disfrutando de la vida muelle. Sin la Cruz Blanca, tendríamos la marginalidad creciente (hay crisis, ya sabes) llamando a nuestra puerta. ¿Es suficiente este estado de las cosas? Evidentemente, no. Sólo describo qué hay, para decir: si queremos que no empeore, a aflojar la mosca. Y punto.
Quizá prefieres un planteamiento con mayor benevolencia: nuestro deber como miembros del género humano es responder al necesitado desde la solidaridad pública. La Cruz Blanca lo hace por nosotros y mucho más barato que una entidad oficial. Ayudemos a que lo siga haciendo o lo haga con mayores posibilidades y hacia más personas.
Sobre el lamento, poco que añadir a la valoración y propuesta de Orús. La coincidencia en espacio y tiempo del festival con el partido de la SD Huesca y su retransmisión es una barbaridad, que Aragón Televisión -causante del desaguisado según el club- debería haber resuelto. También la propia SD Huesca podría andarse con mayor coherencia porque a renglón seguido de manifestar pena, continúa a lo suyo, soflamando para convocar y barrer para casa.
He llegado a pensar en escribir unos mails al club o a la tele para hacerles llegar mi opinión, pero tampoco es caso de iniciar una campaña, ya que al final el resultado dependerá de nosotros. Toca retratarse libremente, incluso haciendo compatible lo uno y lo otro improvisando una fila cero del festival.
Sólo espero que ambos les vaya bien y puesto a elegir entre toros y fútbol, siempre escogería el fútbol... menos esta vez o José Tomás.
Hace 3 años
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