¿El principio del fin?

A estas alturas, creo que el asunto del convenio urbanístico sobre el polígono de las harineras ya es definitivamente un jeroglífico para la mayoría. Descifrarlo al detalle exigiría que te propinara un rollo descomunal, a pesar de que dejara matices y datos en el tintero. Ni siquiera estoy seguro de que fuera capaz de hacerlo de forma que yo mismo me entendiera.

Por eso, te recomiendo poner "harineras+Huesca" en el buscador de guardia, o esperar a las novedades de desarrollo del convenio que forzarán más entradas acerca del asunto, y yo aquí y ahora, me arriesgo a la futurología.

Supuesto óptimo: hacia 2014, comenzarán a ocupar sus viviendas los nuevos vecinos de esa área que vivirán en grandes (altos y/o anchos) bloques de pisos, con avenidas amplias y calles que se conectarán con las vías urbanas del contorno, y espacios libres y patios abiertos. El tráfico del centro (¿peatonalizado en parte?) cuenta con nuevas posibilidades de circulación periférica, aunque el paso de las vías (Juan XXIII - C./ Teruel) no ha comenzado sus obras aún. Los barrios del contorno se ven liberados de las molestias generadas por las actuales fábricas y también por los años de tragar el polvo de los derribos y edificaciones. Se mantiene, en cifras totales, el 65 por ciento del empleo que generaban las empresas allí ubicadas.

Supuesto imaginario: en ese mismo momento, ADIF y el Ayuntamiento encargan un estudio para soterrar o trasladar la estación y la única vía que sigue en servicio dentro de la ciudad, convirtiendo la intermodal en oficinas y viviendas. Por efecto de proximidad, se alcanza un convenio para que la zona industrial de La Encarnación se urbanice en residencial con un gran parque... Todos recuerdan que el 14 de abril de 2008 fue el principio del fin de la ciudad collage.

Supuesto pésimo: de hoy en breve, Murphy hace valer su Ley y los fallos judiciales cierran la harinera Porta anticipadamente, por lo que dos firmantes del convenio denuncian las valoraciones incluidas, a la vez que quiebra una constructora implicada en el asunto, mientras las alegaciones presentadas por un grupo de oscenses cabreados dejan en manos de los tribunales la continuidad del plan, en pieza separada respecto al pleito que interpone el Ayuntamiento (después de haber cedido hasta el extremo) contra los que no cumplen lo firmado, al tiempo que no hay entendimiento sobre el plan especial porque los demás propietarios plantean una ordenación del polígono inaceptable y en una catas aleatorias aparece una necrópolis íbera. Todo sigue igual por décadas.

Supuesto probable: vale aproximadamente el supuesto óptimo más diversos inconvenientes (elige del supuesto pésimo) que son salvados con dificultades y retrasos, de manera que los plazos se dilatan con anuencia de las partes hasta 2017 o... Del supuesto imaginario, ni hablamos.

Dicho lo cual, este blog acepta todo tipo de comentarios sobre estos augurios o también preguntas sobre todo aquello que quiso saber del convenio de las harineras y nunca preguntó, y que quizá tampoco tenga respuesta.

Habrá más que decir, me temo.