31/3/08

D. José María Escriche Otal

A él, le jodería este título. Pero me parece que su trayectoria merece distinción hasta en ese detalle. Además, no le conocía tanto como requiere el atrevimiento de llamarle Pepe por escrito, aunque sí cara a cara.

Muchos hemos sido críticos con bastantes decisiones que tomó directa o colegiadamente, o que al menos se le atribuyen: la desaparición por completo del Jardín de Verano, éste o el otro (que se cayó) Palacio de los Deportes, la millonaria reforma de la Rosaleda, el intento de eliminación de las mairalesas... Hay más y no reblamos hoy de esa opinión. También hemos reconocido sus méritos al participar en la transformación de las fiestas de San Lorenzo cuyo modelo permanece sin que se haya encontrado nada mejor, al poner en marcha una gestión deportiva municipal que es modélica en muchos aspectos, al levantar un Festival de Cine que contribuye a hacer ciudad dentro y fuera. Seguro que hay más ejemplos.

Si exagero me lo dices, pero creo que era de esas personas imprescindibles para entender (o no entender) este pueblo. Más aún: Huesca necesita hoy mismo una decena de escriches que tengan ideas y que sean capaces de aplicarlas con plena responsabilidad y convicción de que son precisas para que esta ciudad avance. Más vale hacer mucho y equivocarse (a juicio de otros) algunas veces, que no hacer nada realmente progresista. Tomen nota los que se sientan aludidos.

Su otra virtud era la cercanía humana. Hizo mucho y no presumió. No se dio la importancia que aquí le otorgamos. Siempre agradecía a sus colaboradores. Si conserva docenas de amigos en todo el mundo, no es casualidad. La red se ha llenado de emocionadas necrológicas.

Este blog le debía este recuerdo en la línea que nos hemos marcado, menos íntimo, más volcado a su vertiente pública, más enfocado a la generalidad y a extraer conclusiones útiles, pero que quiere decir "gracias y hasta luego". Los sentimientos, para cada uno.


(Recuerda la novedad para los comentarios)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No conocí a José María Escriche. Simplemente quería decir que estos días he escuchado hablar a gente que discrepó con él decir cosas bonitas.

En mi opinión un político ha de ser valiente y tomar decisiones. Por lo que he visto, las decisiones de Escriche serían más o menos acertadas, gustarían más o menos, pero tomó decisiones y eso ya dice bastante.

Saludos.

Guillermo dijo...

En efecto. Ese era uno de sus dos principales valores: haber hecho que esta ciudad progresara. El otro valor era ser como fue.
He visto por ahí que había quien le pedía una calle. Estoy de acuerdo, aunque mejor una plaza por su significado de lugar de encuentro, más que de tránsito.
Gracias Nacho