Seguimos con los deportes pero es lo que hay en la actualidad ciudadana, oye. Más todavía cuando las noticias proceden de una leyenda que fue y es el Peñas.
Pude escribir, tras el ascenso del Huesca, que el futuro de un club de élite o profesional "sólo puede asegurarse con sus propios fundamentos sociales (abonados, accionistas) y económicos (patrocinios empresariales, gestión solvente, ingresos fijos y atípicos). Si esos fundamentos fallan, como pasó con el Peñas a mediados de los noventa, adiós sin remedio y hasta la próxima. Puede ser lo que suceda ahora con ese club y el balonmano. ¿Tanto dependíamos de la burbuja? Eso parece".
Y ya lo sabes. La parte más importante, el patrocinio, ha fallado para el baloncesto. Es una demostración de que en Huesca, la vaca da la leche que da.
El club está en una situación absolutamente crítica. No habrá "LEB plata" y ni siquiera la EBA (digamos que dos categorías más abajo) está segura. No hay dinero y punto. La estructura profesional se ha disuelto.
Después de que la actual directiva llegara a los cargos con cierta polémica, estas circunstancias provocarán que se eleve más de una voz en contra, recordando sus promesas y cuentos de la lechera o apuntando a su incapacidad para salir del bache. Quizá con razón.
Incluso habrá quien, con la pasión del aficionado, reclame una intervención de apoyo económico de las administraciones públicas. No seré yo, porque sigo pensando que "el camino más adecuado no es la implicación institucional directa, sin contraprestaciones claras, con crecientes subvenciones anuales, (...) con financiación a fondo perdido, con unas alegrías que los presupuestos municipales no pueden permitirse".
En este caso, el Ayuntamiento (aparte de la ayuda anual) ya había puesto lo suyo, adelantando parte de los costes de inscripción. Sin embargo, mantener los gastos de sueldos, viajes, organización... es otra cosa.
Comparto la tremenda decepción de muchos que tenían esperanza en que el baloncesto en Huesca volviera a ser lo que se fue, o que simplemente disfrutaban con las últimas temporadas, pero creo que se trata de una decisión responsable. Mejor esto que acabar con acreedores y deudas hasta las cejas o hasta la disolución.
Sin dramas, por favor. El "hasta la próxima" que antes indicaba quiere decir que, cuando se reúnan todas las condiciones necesarias, habrá que ir escalando y sacar la cabeza de nuevo. Ahora los directivos tienen que garantizar la supervivencia del club, a ser posible con equipo en la EBA. O dejar paso a quien pueda asegurarlo, para reconstruir una base que permita mirar de nuevo hacia un horizonte ambicioso.
Espero que el balonmano salte los obstáculos y creo que, con la explosión futbolera azulgrana, esta frustración verdiblanca será menos generalizada, aunque es una pena.
[En la ilustración, Brian Jackson como imagen de cuanto ha sido y quizá aún sea posible, en la categoría que corresponda. Sin necesidad de hacer Magia y más Magia]
[Actualizo: parece que la situación es cambiante. Esperemos a su resolución antes de opinar sobre determinadas posturas]
Hace 3 años
4 comentarios:
Una pena lo del Peñas, de verdad, pero cuando no hay dinero es lo que suele suceder.
Pero para drama, lo que sucedió ayer noche en la plaza del Bolinga. La brutalidad policial de los locales, porra en mano contra un hombre que tocaba el saxo.
De verdad guillermo, fue lamentable. En mi blog está descrito lo de ayer. Si quereis, pasaros y lo leeis. Pero estas cosas no se deben consentir.
Pongo una entrada, Vicente
hace años mi padre jugaba en el corbis y el madrid ya perdio en huesca en los años 60
Por ahí debo tener la Historia del Baloncesto en Huesca, que dejó Verbi a medias y acabó su hija, que recoge unos antecedentes donde Huesca se medía al máximo nivel. Gracias a aquellos, el Peñas fue fundador de ACB. Luego nos atropelló el boom sustentado en unas pesetas que aquí no las había. Como euros ahora...
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