Carta abierta a Fernando Lafuente

Nadie puede negar que has trabajado en el Ayuntamiento y que, además, lo has hecho en solitario, con toda la dificultad que supone para estar en el candelero.

Sí, pero en opinión de los oscenses, esa tarea no te ha hecho merecedor más que de un cuarto puesto entre sus preferencias como alcalde... ¿Será que te han asignado otra función? ¿Será que la idea es que te conviertas en el contrapeso del sidecar de Elbog?

Es mucho interpretar pero de alguna manera, cuando este lunes, los tiros apuntan en esa dirección que ya parecía quedar clara en la misma noche del 27, habrá que justificar democráticamente y no sólo legalmente, que vayas a asumir -si se confirma- un poder que no te correspondería. Pero Huesca, lo sabes, es muy peculiar y de la misma forma que muy pocos imaginan hoy a otro alcalde que no sea Elboj, escasos ciudadanos conciben la posibilidad de un gobierno en minoría mayoritaria, sometido a la inestabilidad de una negociación continua de cada proyecto, de cada decisión en pleno.

Bueno, pues -con tu permiso y a pesar de alguna maniobra extraña a estas alturas aunque legítima- me arriesgo a dar por hecho el pacto PSOE-PAR en el Ayuntamiento de Huesca y levanto la bandera del escepticismo.

Con dos concejales, una de ellas inexperta, se te va a exigir que cambies el Ayuntamiento en las formas y en el fondo. O sea, de ti depende que dejemos que quejarnos por un lado, de la prepotencia, la distancia, los caprichos, la ignorancia, la torpeza. Y por otro lado, de la falta de pulso económico y de progreso, del dinero gastado en ornato, de la carencia de participación, del nulo empuje transformador, de los proyectos eternizados, de la incapacidad para reaccionar... De ti depende porque sería milagroso una mutación de Elbog/j algo más que cosmética.

Ese es tu desafío, además de esquivar el abrazo del oso y los intentos de los demás grupos por dividir, resaltar las contradicciones...

¿Entiendes el escepticisimo ahora?

No querría ser de mal agüero y por eso, hay que recordar que pase lo que pase, habrá PLHUS y Palacio de Congresos, aparcamientos y transporte urbano, Pyrenair en marcha y más tramos de autovía, variante de tren (adiós pasos a nivel) y paseo de la muralla,... Son sólo unos ejemplos. No bastará pero servirá para tener tela asegurada que cortar.

Que el traje le siente bien a Huesca y a los oscenses, será cuestión de otros factores.